El proyecto que lleva por nombre “Yaretanol, el petróleo verde”, fue merecedor del Premio Nacional a la Inventiva Tecnológica Popular Luis Zambrano 2009, por brindar continuidad al desarrollo sustentable, así como a la política ecológica y conservacionista que emprende el Gobierno Bolivariano, presidido por el Comandante Hugo Chávez.
La creación del combustible ecológico denominado yaretanol está basado en el yare, líquido que expulsa la yuca magra al ser comprimida para la elaboración del casabe. Esta novedad está promoviendo la articulación de los 13 Consejos Comunales de El Rincón, zona ubicada en el municipio Libertador del estado
Carabobo.
“Articular con los 13 Consejos Comunales de El Rincón es un paso en el cual avanzamos para hacer realidad el tejido
social que genera el proyecto”, explicó José Gregorio Jiménez, responsable de la investigación.
Más allá de las 150 familias que habitan en El Rincón, y todos los productores agropecuarios, campesinos y quienes trabajan con la yuca magra (amarga), se verán beneficiados con el
yaretanol, proyecto propulsado por el Gobierno Bolivariano y apoyado por el Ministerio del Poder Popular para la Ciencia, Tecnología e Industrias Intermedias (MCTI), a través de las comunidades organizadas.
Al respecto, precisó Jiménez, que la idea es conformar y trabajar en una comuna, respetando las culturas y las tradiciones de los comuneros y comuneras, quienes venderán el yare, producto que antes era un desecho, lo que le permitirá reinvertirlo en su comunidad.
“Previo al proceso para obtener el
yaretanol queremos incluir un sistema de siembra para beneficiar a la comunidad, a los agricultores. Posterior a eso se cosecharía la yuca, aprovechar, además, la celulosa contenida en las hojas de estas plantas -e incluso la yuca dañada- con el objetivo de transformarla en etanol”, detalló el responsable de la investigación.
Un impacto socioeconómico del proyecto es impulsar a los productores de yuca a establecer compras programadas con el
Estado, cuyo consumo no es regular. Asimismo, la planta base para la producción de etanol impulsaría capacitación y fuente de empleo indirecta.
La creación de la planta, donde trabajarían familias enteras, fabricaría a mediano plazo la harina para el casabe, generaría seguridad social evitando el ausentismo escolar. Asimismo, aportaría elementos para hacer el proceso más industrial.
Romina García /Prensa Fonacit/Prensa MCTI
